La NASA ha compartido una imagen del telescopio espacial James Webb que algún día podría ayudar a los astrónomos a responder preguntas de larga data sobre nuestro universo. La imagen que ves arriba muestra a WR 124, una estrella ubicada en la constelación de Sagitario, a unos 15.000 años luz de la Tierra. Cuando JWST vio por primera vez WR 124 en junio de 2022, capturó a la estrella pasando por una fase Wolf-Rayet. Según la NASA, solo algunas estrellas masivas pasan por esa transición antes de finalmente explotar. Los que sí lo hacen son algunos de los cuerpos celestes más grandes y brillantes del cielo nocturno. En el caso de WR 124, la NASA estima que la estrella tiene 30 veces la masa del Sol y ha perdido 10 soles de materia hasta el momento. Con el tiempo, el gas emitido por las estrellas Wolf-Rayet se enfriará y formará polvo cósmico.
Hay belleza en la fugacidad. 🌸
La deslumbrante imagen de Webb de la superbrillante y masiva estrella Wolf-Rayet recuerda la naturaleza efímera de los cerezos en flor. La fase Wolf-Rayet es una etapa fugaz por la que solo pasan algunas estrellas, poco antes de explotar: https://t.co/ZOAmKgtshI pic.twitter.com/fC0tL24iUe
— Telescopio Webb de la NASA (@NASAWebb) 14 de marzo de 2023
El polvo espacial es algo que los astrónomos están interesados en estudiar por varias razones. El material es un bloque de construcción importante del universo. Como señala la NASA, alberga estrellas fusionadas e incluso puede fusionarse para formar planetas. Sin embargo, por el momento no existe una teoría que explique la cantidad de polvo cósmico que hay en el universo. JWST puede ayudar a los astrónomos a resolver este rompecabezas. “Antes de Webb, los astrónomos amantes del polvo simplemente no tenían suficiente información detallada para investigar cómo se formaba el polvo en entornos como WR 124, y si las partículas de polvo eran lo suficientemente grandes y numerosas para sobrevivir a una explosión de supernova y contribuir significativamente a la formación general de polvo. presupuesto”, dijo la NASA. «Ahora estas preguntas se pueden explorar con datos reales».